En psicología mejor ir despacio

No por mucho madrugar amanece más temprano es un dicho que también podríamos aplicar a la psicología. La impaciencia por obtener resultados rápidos se puede volver contra nosotros dentro del trabajo psicológico. Por eso es importante entrar por la puerta de la consulta (en nuestro caso por nuestra sala de espera de ZOOM con la cámara encendida) con las expectativas atadas al caballo del realismo.

En muchos casos el sufrimiento que experimentamos viene alimentándose desde hace mucho tiempo con nuestros pensamientos y actos. Así que paciencia, todo llegará a su tiempo. Lo importante es dar el paso de buscar ayuda psicológica y lo segundo aplicar la sabiduría de aceptar que cada uno de nosotros somos un mundo y que tenemos un ritmo único. Sin presiones. Así está perfecto.

Daniel Gil Abascal

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Este sitio web utiliza COOKIES para que tengas la mejor experiencia. Si continúas navegando estás dando tu consentimiento para la aceptación de las mencionadas cookies y de nuestra política de privacidad